'Dios quita y pone Reyes' |
“El muda los tiempos y las edades; quita reyes, y pone reyes; da la
sabiduría a los sabios, y la ciencia a los entendidos” (Daniel 2:21)
Lo que estamos viviendo los mexicano venezolanos en estas elecciones era
inconcebible hace veinte años. Los que lo tienen todo han visto en este
tiempo un cambio irremediable que atenta contra su situación de
impunidad y privilegios. Se esta ante el umbral de un cambio real y
verdadero en el sistema político de nuestro país.
Hace veinte años era inconcebible que el pueblo tuviese capacidad de
pensar, era imposible que el destino del país no lo definieran las
cúpulas de todo (hasta las de la religión católico romana) era inaudito
que los medios de comunicación se salieran de “la línea” trazada por el
Presidente en turno, era inverosímil creer que pudiera estar el destino
de la presidencia entre tres adversarios que son completamente
antagónicos y cuyos proyectos de gobierno, son diametralmente opuestos.
Como reza el versículo de Daniel, Dios muda los tiempos y las edades.
Dios ha cambiado radicalmente a nuestro país en solo veinte años, que
es el tiempo en que nace arrollador el cristianismo en un avivamiento
sin precedentes y que tomado las alturas celestiales en oración y ha
hecho una batalla de intercesión por nuestra nación, para arrancarla del
pecado, la corrupción, las maldiciones ancestrales y la religiosidad,
para transformarla en lo que vemos hoy, la antesala de un nuevo amanecer
en Cristo.
Hoy mas que nunca, los mexicanos podemos estar seguros de que salvo
dos o tres profetas (uno de ellos en Atlixco, por cierto) nadie sabe
quien ganara la Presidencia de la República, pues el estado de confusión
es tal, que reconocidos priístas llaman a votar por el PRD para hacer
su “voto útil”, reconocidos perredistas, son nombrados por el Presidente
Fox, para “Presidir unas fiestas de la Independencia y la Revolución”
que quien sabe si se realicen y reconocidos panistas son ahora muy
buenos activistas del PRI.
Confirmando lo anterior, los cristianos de Puebla, tenemos tres
candidatos para Diputaciones Federales, uno del PRD, el C. P. Miguel
Ángel de la Rosa Esparza, otro del PAN, el C.P. Raúl Barranco Tenorio y
otra por el PRI, Claudia Hernández, todos ellos muy bendecidos y
exitosos, pero cada uno pidiéndonos que votemos por su partido y
nosotros nos preguntamos ¿Por qué partido votar?
Si en alguna ocasión nadie estuvo seguro de algo, es esta, con
respecto a cual será nuestro futuro presidente, pero en medio de esta
vorágine política, la palabra nos recuerda que Dios es quien quita
reyes, pues aunque el hombre, quiera sustituir las obras, “el trabajo” y
los “acuerdos” con las fuerzas políticas, por el arrepentimiento
genuino y el pedir perdón a los ofendidos, Dios cumplirá su palabra en
el sentido de que la impunidad no seguirá gobernando a nuestro Estado
hundiéndolo en el ostracismo y que aun cuando todo el mundo diga que ya
se olvido el asunto de Kamel Nacif, Dios nos mostrará su poderosa mano,
para que todos veamos su poder y su gloria, que no necesita de nosotros
para hacer sus designios.
Por tanto, debemos confiar en el que también pone reyes. El ya
determino y dijo quien va a ser nuestro futuro Presidente; ya dio la
profecía de que este hombre -aun sin conocerlo- cumplirá -como
Nabucodonosor- su propósito para el cual lo pone a gobernar.
El ya tiene diseñada su estrategia para hacerlo triunfar, no valdrá
nada de lo que se quiera hacer para impedirle llegar por parte de sus
oponentes. Es mas, nosotros mismos, los cristianos, que no recibimos
consejo de nuestro liderazgo porque no tuvimos un encuentro con ninguno
de los candidatos, seremos movidos enfrente de la urna, a depositar
nuestro voto a favor suyo, porque Dios pondrá en nosotros el querer como
el hacer y nos hará ser el fiel de la balanza, que mueva el resultado
hacia quien el ya estableció.
Hemos orado los cristianos mucho por estos tiempos. Hemos esperado en
Dios que se haga su voluntad en las cuestiones políticas. Hemos
proclamado que México será una nación usada por Cristo para expandir su
evangelio en los cinco continentes. Ahora pidámosle que nos de la
sabiduría de los sabios y la ciencia de los entendidos, para que podamos
cubrir con el poder superior al nuevo Presidente, para que haya unidad
en torno a él y a su proyecto de gobierno, para que no prevalezcan los
empresarios del pecado, que quieren promover sus ilícitos negocios y sus
aviesas intenciones y que pueda -en obediencia con el Padre- iniciar la
grandiosa transformación de México.
Y digamos lo que dijo Daniel delante de Nabucodonosor: “A ti, oh Dios
de mis padres, te doy gracias y te alabo, porque me has dado sabiduría y
fuerza, y ahora me has revelado lo que te pedimos, pues nos has dado a
conocer el asunto del rey”
Cumplamos con nuestro deber ciudadano, vayamos a votar religiosamente
el próximo dos de julio, obedezcamos el mandato de Dios, cuando nos
dice que demos a César, lo que es de César, porque lo principal que
debemos dar a César, es nuestro voto, porque con nuestro voto, la voz
del pueblo, será, la voz de Dios.
C.P. MANUEL GUZMÁN PEREZ
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Eres inteligente lee este blog y aprenderás cosas escondidas que hará que escoja lo BUENO