*Si
experimentas culpa por las cosas pasadas, incluso por las que ya
reconociste y confesaste delante de Dios, es muy importante pensar en lo
que está sucediendo: Probablemente estás manteniendo vivo el recuerdo
de los errores cometidos por qué estás enojado contigo mism@ y te estás
culpando. Para vencer esto, debes concentrarte en el Salvador, no en tu
error. Piensa en lo que Cristo ha hecho por ti y no en lo que tú has
hecho. Si Jesús perdona tus pecados, entonces tú puedes perdonarte a ti
mism@ y en cierta manera dejar el juicio sobre tus actos o los que
cometieron contigo. Así como Dios perdona, El desea que tú lo hagas
también contigo y con otros. Perdonarse a sí mism@ significa que te
pondrás de acuerdo con Dios en su perdón y aceptarás su inmenso amor por
ti. ¿Qué debes perdonarte? ¿A quién necesitas perdonar? Recuerda que
perdonar es salud.
*Jamás debemos subestimar el poder de nuestras acciones.
*Un pequeño gesto puede transformar para bien o para mal la vida de otro.
Le sonrío a la vida porque encontré el verdadero amor que es ...
'DIOS' SI!