Poesía sacada del futuro libro de la saga "Tu Destino Hoy" llamado "Despertando de la ignorancia" por Alferrez...
"...Yo prefiero tener fe y creer en un Dios al que no puedo ver pero que lo puedo sentir, un Dios creador, arquitecto y diseñador de ésta tierra, del sistema solar, y de nuestros propios cuerpos, que nos dio ojos para ver y observar la hermosura de su creación, la hermosura de las de las plantas, de las montañas y de las estrellas en el cielo. Ojos para observar la belleza humana de una esposa o de unos hijos, esa belleza no puede ser casualidad… Creo en un Dios que nos dio oídos para escuchar, para escuchar el sonido de los mares, de las olas y de los animales, incluso el sonido de la música, melodiosa, resultado de talentos humanos que tampoco pueden ser casualidad… Ese mismo Dios también nos dio una nariz para el olfato, para oler y respirar ese aire puro que nos mantiene vivo, para oler esas flores que a tantas mujeres hacen suspirar, para oler esos perfumes preciados, perfumes que tampoco provienen de la casualidad… Y que decir de la lengua que Dios nos dio para el gustar, para lo dulce de lo amargo diferenciar, para esos ricos alimentos poder saborear, y que me dicen de los besos, ¿puede ser esa sensación una casualidad?... Pues aquí les dejo una última, el sentido de tocar, el sentido de sentir, el sentido del AMAR, lo que sientes a un ser querido abrazar, a una mascota tocar, o a tu pareja acariciar, esa corriente que te recorre todo el cuerpo, que hace tus piernas temblar, un sentimiento que no tiene alas pero que te hace volar, una fuerza que te impulsa cada día a luchar, a luchar por lo que tienes y por lo que has de esperar… Una energía que te renueva y re-potencia de una manera sobrenatural, que cuando piensas que ya no puedes, ese amor te puede levantar, ¡que grande y poderoso es el amor! Esa sustancia que no se puede palpar, que no se puede medir, que no se puede tachar, una sustancia infinita, sin principio ni final, que te hace reír, pero también llorar, que incentiva tu mente y te hace soñar, que te hace prisionero y también te da libertad… Una sustancia que mueve al mundo de aquí y para allá… Y aunque experimentos hagan, y teorías quieran dar, esa sustancia no tiene explicación, no se puede comprobar, porque es más grande y poderosa que nuestra lógica, es algo que va mas allá, mas allá de los sentidos, del álgebra y del azar, el amor no tiene límites ni fronteras, no se puede encapsular… así que a los ateos yo les voy a explicar, que Dios si existe, aunque lo quieran negar, por que Dios es verdadero, así como el amor es real, ya que la sustancia del amor es Dios mismo, porque Dios es amor, y eso mis queridos lectores, tampoco puede ser casualidad..."
"...Yo prefiero tener fe y creer en un Dios al que no puedo ver pero que lo puedo sentir, un Dios creador, arquitecto y diseñador de ésta tierra, del sistema solar, y de nuestros propios cuerpos, que nos dio ojos para ver y observar la hermosura de su creación, la hermosura de las de las plantas, de las montañas y de las estrellas en el cielo. Ojos para observar la belleza humana de una esposa o de unos hijos, esa belleza no puede ser casualidad… Creo en un Dios que nos dio oídos para escuchar, para escuchar el sonido de los mares, de las olas y de los animales, incluso el sonido de la música, melodiosa, resultado de talentos humanos que tampoco pueden ser casualidad… Ese mismo Dios también nos dio una nariz para el olfato, para oler y respirar ese aire puro que nos mantiene vivo, para oler esas flores que a tantas mujeres hacen suspirar, para oler esos perfumes preciados, perfumes que tampoco provienen de la casualidad… Y que decir de la lengua que Dios nos dio para el gustar, para lo dulce de lo amargo diferenciar, para esos ricos alimentos poder saborear, y que me dicen de los besos, ¿puede ser esa sensación una casualidad?... Pues aquí les dejo una última, el sentido de tocar, el sentido de sentir, el sentido del AMAR, lo que sientes a un ser querido abrazar, a una mascota tocar, o a tu pareja acariciar, esa corriente que te recorre todo el cuerpo, que hace tus piernas temblar, un sentimiento que no tiene alas pero que te hace volar, una fuerza que te impulsa cada día a luchar, a luchar por lo que tienes y por lo que has de esperar… Una energía que te renueva y re-potencia de una manera sobrenatural, que cuando piensas que ya no puedes, ese amor te puede levantar, ¡que grande y poderoso es el amor! Esa sustancia que no se puede palpar, que no se puede medir, que no se puede tachar, una sustancia infinita, sin principio ni final, que te hace reír, pero también llorar, que incentiva tu mente y te hace soñar, que te hace prisionero y también te da libertad… Una sustancia que mueve al mundo de aquí y para allá… Y aunque experimentos hagan, y teorías quieran dar, esa sustancia no tiene explicación, no se puede comprobar, porque es más grande y poderosa que nuestra lógica, es algo que va mas allá, mas allá de los sentidos, del álgebra y del azar, el amor no tiene límites ni fronteras, no se puede encapsular… así que a los ateos yo les voy a explicar, que Dios si existe, aunque lo quieran negar, por que Dios es verdadero, así como el amor es real, ya que la sustancia del amor es Dios mismo, porque Dios es amor, y eso mis queridos lectores, tampoco puede ser casualidad..."