(experiencia cercana a la muerte) |
-La respuesta del profesor Ritchie, graduado con solo 20 años en Física, la primera persona a la que entrevisté por una ECM.
«En la visión panorámica de mi vida —dijo— señalaba todos mis logros
académicos y materiales, pero a la luz brillante no le interesaba eso,
solo si había aprendido a amar». ¡Un tío tan brillante y sentía que el
final de la vida de lo único que trata es de eso, del amor! Me afectó
mucho.
He estado sumido en un profundo coma durante una semana en el que viajé a otra dimensión del universo; una dimensión que nunca antes pude llegar a soñar que existiese”. Así arranca el neurocirujano de la Universidad de Harvard, Eben Alexander, su relato en primera persona sobre la vida después de la muerte, una experiencia que le ha hecho creer en la vida eterna y que recogerá próximamente en un libro titulado Proof of Heaven: A Neurosurgeon’s Journey into the Afterlife (La prueba del cielo: el viaje de un neurocirujano a la vida después de la muerte).
He estado sumido en un profundo coma durante una semana en el que viajé a otra dimensión del universo; una dimensión que nunca antes pude llegar a soñar que existiese”. Así arranca el neurocirujano de la Universidad de Harvard, Eben Alexander, su relato en primera persona sobre la vida después de la muerte, una experiencia que le ha hecho creer en la vida eterna y que recogerá próximamente en un libro titulado Proof of Heaven: A Neurosurgeon’s Journey into the Afterlife (La prueba del cielo: el viaje de un neurocirujano a la vida después de la muerte).
La
gente dice que abandona su cuerpo, que lo ven desde arriba, que va por
una especie de pasillo, llega a una luz brillante, en la que siente
compasión y amor absolutos, que amigos y familiares que han muerto la
esperan, y tiene un recuerdo panorámico en el que ve toda su vida; y
todo eso sucede al mismo tiempo y de forma instantánea. Y ahora sabemos
que esa pauta también la han seguido personas al cuidado de moribundos.
-La mayoría le dijo que no quería volver a la vida.
Existen muchos testimonios de personas que estuvieron en el umbral de la muerte o clínicamente muertos, con su sigla ECM (experiencia cercana a la muerte)
por varios minutos, que “coincidentemente”, han tenido relatos
similares sobre lo que vivieron. Para ellos cambió la percepción de la
muerte asegurando que sólo es el inicio de una nueva vida en un estado
de completa paz y alegría en un lugar mágico del cual no volverian.
Uno de los casos más recientes conocidos es del neurocirujano Alexander Eban , quien en su libro
Proof of Heaven: A Neurosurgeon’s Journey into the Afterlife (La prueba
del cielo: el viaje de un neurocirujano a la vida después de la muerte)
relata su experiencia luego de pasar siete días en coma por una
meningitis donde no sólo se encontró con seres queridos que ya habían
fallecido, sino que habla de su ascensión al más allá junto a un ángel
que lo guió y acompañó en su viaje.
Así como él, también hay muchos otros casos de personas
que hablan del ya famoso “túnel” que los lleva hacia un lugar lleno de
paz, pero que por tener aún temas pendientes tuvieron que regresar
incluso contra su voluntad de aquél paraíso, situación que les dió la
oportunidad de entregar un testimonio de lo que vieron, abriendo el
debate sobre la existencia de la vida después de la muerte.
A qué hemos venido?
Es
una pregunta que al menos la mayoría se ha hecho alguna vez. El saber
por qué estamos acá no es algo que recordemos. Para los estudiosos en el
tema cada uno tiene la opción de aceptar venir o no, escogiendo la
familia que tendremos, cómo viviremos e incluso sabemos el cómo y cuándo
tendremos que partir. Empero también explican que el espíritu tiene la
libertad de cambiar su elección durante su vida y son esos los casos de
personas que se han salvado de muertes inminentes (siendo para ellos una
elección de vida).
Saber exactamente si hay vida después de la
muerte no es algo fácil, sólo nos quedan relatos de quienes dicen haber
estado en un lugar mágico, lleno de amor y felicidad como consuelo para
quienes hemos sufrido grandes pérdidas y para otros queda la
incertidumbre de saber si “quizás” en esta vida se volverán a encontrar
con quienes ya partieron.
Dios permite estas experiencias sobre el infierno para captar interés a su Palabra sobre este tema. Creo que el tiempo se está acabando, y hay algunas cosas inusuales que Dios está haciendo en la tierra actualmente para ayudar a la gente a despertar a la verdad. Él implora a la gente para que escuche su Palabra. Este no es un mensaje de condenación, sino un mensaje de advertencia. Dios no quiere que nadie vaya por el camino tan intensamente transitado en el que muchos están. Muchas personas se sienten ofendidas por un mensaje sobre el infierno, y creen que los cristianos deberían guardarse sus creencias para sí mismos. Sin embargo, ¿deberíamos no advertirles? Intente verlo de este modo: Supongamos que usted está durmiendo en una habitación de un hotel, y es de madrugada. Alguien comienza a gritar: "¡Fuego! ¡Fuego!". A usted no sólo no le importaría que esa persona le despertara, sino que también estaría sumamente agradecido por la advertencia si hubiera un incendio de verdad. La incomodidad sería muy bienvenida a cambio de su propia vida. Algunas personas simplemente no se dan cuenta de que hay un fuego real que evitar.
La Biblia dice que, quienes rechazan a Jesús irán al Infierno (Apocalipsis 20:11-15). Apocalipsis 21:8 dice: "Pero los... incrédulos... tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre". El infierno es un lugar de castigo ardiente (Mateo 25:41; Apocalipsis 19:20). El infierno es eterno (Mateo 25:46). Los perdidos irán al infierno para siempre (Apocalipsis 21:8). El único camino para evitar el infierno e ir al cielo es Jesucristo. Jesús dijo: "Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí" (Juan 14:6). "Porque tú, Señor, eres bueno y perdonador, y grande en misericordia para con todos los que te invocan" (Salmos 86:5).
Hay personas que han sido llevadas al infierno o han
tenido una vislumbre del infierno en su lecho de muerte. Algunas de
ellas han documentado su experiencia mediante vídeos y libros. En su
libro “Llevado al paraíso”, el Dr. Richard Eby menciona una experiencia
en la que Dios le dio una visión de dos minutos de duración del
infierno, en la cual él estaba situado en un pozo. Le dijeron que dos
minutos era todo lo que él podía soportar. Él dijo: "Al instante,
comprendí que era un pecador muerto llevado a las entrañas más profundas
de la tierra. Un sentimiento de absoluto terror se apoderó de mi ser".
En aquel pozo, pequeños demonios parecidos a arañas caminaban sobre él
en total oscuridad y desolación. "Los demonios se mofaban y me decían:
"¡Maldice a Dios! ¡Maldice a la gente! ¡Y el olor! Horrible,
desagradable, viciado, fétido, podrido y malvado… todo ello mezclado y
concentrado. Mi terror se acumuló hasta que estuve a punto de
derrumbarme en completa desesperanza, aplastante desesperación, soledad
abismal. Yo era un alma eternamente perdida por elección propia. Las
pegajosas y húmedas paredes me mantenían aplastado por la eternidad sin
escape alguno".
Dios permite estas experiencias sobre el infierno para captar interés a su Palabra sobre este tema. Creo que el tiempo se está acabando, y hay algunas cosas inusuales que Dios está haciendo en la tierra actualmente para ayudar a la gente a despertar a la verdad. Él implora a la gente para que escuche su Palabra. Este no es un mensaje de condenación, sino un mensaje de advertencia. Dios no quiere que nadie vaya por el camino tan intensamente transitado en el que muchos están. Muchas personas se sienten ofendidas por un mensaje sobre el infierno, y creen que los cristianos deberían guardarse sus creencias para sí mismos. Sin embargo, ¿deberíamos no advertirles? Intente verlo de este modo: Supongamos que usted está durmiendo en una habitación de un hotel, y es de madrugada. Alguien comienza a gritar: "¡Fuego! ¡Fuego!". A usted no sólo no le importaría que esa persona le despertara, sino que también estaría sumamente agradecido por la advertencia si hubiera un incendio de verdad. La incomodidad sería muy bienvenida a cambio de su propia vida. Algunas personas simplemente no se dan cuenta de que hay un fuego real que evitar.
La Biblia dice que, quienes rechazan a Jesús irán al Infierno (Apocalipsis 20:11-15). Apocalipsis 21:8 dice: "Pero los... incrédulos... tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre". El infierno es un lugar de castigo ardiente (Mateo 25:41; Apocalipsis 19:20). El infierno es eterno (Mateo 25:46). Los perdidos irán al infierno para siempre (Apocalipsis 21:8). El único camino para evitar el infierno e ir al cielo es Jesucristo. Jesús dijo: "Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí" (Juan 14:6). "Porque tú, Señor, eres bueno y perdonador, y grande en misericordia para con todos los que te invocan" (Salmos 86:5).
Experiencias en el umbral de la muerte (Vida... por dm_5164a596aeb06
Visiones del cielo y del infierno (Vida después... por dm_5164a596aeb06